En 1908 Rubén Darío pasó una temporada en la casa del Dr. Luis H. Debayle en la Isla del Cardón en Nicaragua; la gracia de una de las hijas del Dr (Margarita de cinco años) inspiró a Darío para componer éste bello Poema-Cuento. Es perfecto ejemplo de rima y ritmo en una poesía.
Personalmente puedo decir que ésta hermosa poesía tiene especial valor para mí porque mi mamá y mi abuelita nos la enseñaron a mi hermana y a mí. Yo se la enseñé a mi hija que desde los cuatro años la declamaba divinamente. Gracias a Dios todavía tengo presentes en mi vida a mi mamá y abuelita, que ahora con mi hija somos cuatro generaciones vivas y unidas por el amor y cariño.
A MARGARITA DEBAYLE
Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar;
yo siento
en el alma una alondra cantar;
tu acento.
Margarita, te voy a contar
un cuento.
Este era un rey que tenía
un palacio de diamantes,
una tienda hecha del día
y un rebaño de elefantes.
Un kiosko de malaquita,
un gran manto de tisú,
y una gentil princesita,
tan bonita,
Margarita,
tan bonita como tú.
Una tarde la princesa
vio una estrella aparecer;
la princesa era traviesa
y la quiso ir a coger.
La quería para hacerla
decorar un prendedor,
con un verso y una perla,
una pluma y una flor.
Las princesas primorosas
se parecen mucho a ti.
Cortan lirios, cortan rosas,
cortan astros. Son así.
Pues se fue la niña bella,
bajo el cielo y sobre el mar,
a cortar la blanca estrella
que la hacía suspirar.
Y siguió camino arriba,
por la luna y más allá;
mas lo malo es que ella iba
sin permiso del papá.
Cuando estuvo ya de vuelta
de los parques del Señor,
se miraba toda envuelta
en un dulce resplandor.
El rey dijo: "¿Qué te has hecho?
Te he buscado y no te hallé;
y que tienes en el pecho,
que encendido se te vé?
La princesa no mentía,
y así, dijo la verdad:
"Fui a cortar la estrella mía
a la azul inmensidad."
Y el rey clama: "¿No te he dicho
que el azul no hay que tocar?
¡Qué locura! ¡Qué capricho!
El Señor se va a enojar."
Y dice ella: "No hubo intento:
yo me fui no sé por qué;
por las olas y en el viento
fui a la estrella y la corté."
Y el papá dice enojado:
"Un castigo has de tener:
vuelve al cielo, y lo robado
vas ahora a devolver."
La princesa se entristece
por su dulce flor de luz,
cuando entonces aparece
sonriendo el buen Jesús.
Y así dice: "En mis campiñas
esa rosa le ofrecí:
son mis flores de las niñas
que al soñar piensan en mí."
Viste el rey ropas brillantes,
y luego hace desfilar
cuatrocientos elefantes
a la orilla de la mar.
La princesa está bella,
pues ya tiene el prendedor,
en que lucen, con la estrella,
verso, perla, pluma y flor.
Margarita, está linda la mar,
y el viento
lleva esencia sutil de azahar:
tu aliento
Ya que lejos de mí vas a estar
guarda, niña, un gentil pensamiento
al que un día te quiso contar
un cuento.
Cotidianidad, realidad, imaginario, un mundo paralelo, con mas luz que el nuestro, busco combinarlos para obtener un mundo mejor para nuestros hijos y nuestro planeta...
viernes, 19 de diciembre de 2008
TE VOY A CONTAR UN CUENTO... Poema de Rubén Darío titulado: ''A Margarita Debayle''
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Hola! Tia Mo;o
ResponderBorrarEsta muy bonito el poeme , mi pachi , mi abi, y yo nos lo queremos aprender , es como un cuento en un poema , es muy creativo e imaginativo ,,, yo quiero una prendedor asi.
esta muy bonito tu blog y ya voe que tienes un comentario acerca de no talar los arboles
bueno solo pasaba a saludar
BYE.
Mmmmm... creo que ya sabes quien soy .